lunes, 19 de noviembre de 2018

Capítulo 404 "Despojada salerosa"

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Me había dado lástima. Eso pasó. Esa fue la causa por la que volví a sentarme a su lado y dejé la puerta abierta de par en par. Lástima a pesar de que me estaba haciendo pasar un momento de mierda. Porque me acordé de la bolsita de palo santo que me regaló el primer día que nos vimos, cuando fuimos a cenar, la sacó de la mochila azul y me la ofreció, toda despojada y generosa, malagueña y salerosa. Me quedé pasmada porque me hacía un regalo, nadie nunca hace regalos así como así, al menos a mi no me pasa, pero ella me regalaba la bolsita de palo santo. Encima me encanta a mi el aroma del palo santo. Encendé un poco de palo santo, Mamertón, dale, así me ventilas el olor a pecaíto que te sale de la boca y de los sobacos, se está impregnando toda la cama, hasta las cortinas tienen olor a indigestión, Risita, cerrame la puerta del baño también, y después te tomás el buque, no te quiero ver por un rato más que largo. Ya me volvería a Sevilla yo, te lo juro, el mar me hace acordar a Ella, a que se fue sin decirme, a que no vuelve ni me escribe, ayer miré su whatsapp para ver a qué hora se había conectado y no tenía foto, pensé que me había eliminado, bloqueado, pensé que no me quería más, casi me muero de la tristeza, pero al rato tenía otra foto, una con mariposas, la había cambiado y fue que tardó en aparecer… soy tan boluda a veces… igual es una turra, mi Gitana...

Cándido y Pangloss.
Pero no me regaló solamente el palo santo, vuelvo a la Escohotadiana, también me dio un lápiz mecánico, porque yo había dicho una frase que le gustó, tenemos las misma manías, ir anotando lo que suena lindo e interesante, en una libretita lo anotó, y después me regaló también el lápiz, porque yo hacía mil años que no veía uno, uno mecánico, desde la secundaria, y se lo dije, entonces me lo dio. Y mirá, Gordo, antes de irte mirá, este libro también, me lo trajo especialmente, me lo compró a mi, ella estaba estudiando algo así como filosofía, unas materias que tenía que dar porque quiere estudiar algo de la física, de la biología, ya no me acuerdo, y estaba leyendo este libro porque tenía que estudiarlo para dar la materia, me contaba entusiasmada que era interesantísimo y ahí nos pusimos a charlar de filosofía, como dos horas sin parar, y al otro día me lo compró y me lo dio cuando fuimos a Ronda de picnic. ¿No es rarísimo lo que le pasó después? ¿Lo que nos pasó a la noche en mi departamento? No se quería ir, así nomás, cuando empezó a taladrarme con lo de mi mamá no lo soporté y le dije que saliéramos, y no, no se movía, empezó a vaciar la mochila, sacaba todo de adentro y lo desparramaba sobre las mantas mientras me torturaba con lo de mi mamá, lo particular y casi de película de terror fue q (Sigue)

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